- Supera tus miedos
- Decirlo es fácil, pero el cómo...es otra cosa.
- ¿Recuerdas cuándo eras una niña? Cuando entre en tu habitación a las seis de la mañana para arte un beso antes de irme a trabajar te encontré sentada, mirando el armario, abierto de par en par. Y tú, lo mirabas fijamente.
- Esto no es un monstruo imaginario. Esto es real.
- Cada cual supera sus miedos a su manera y tú, simplemente los enfrentaste.
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